La duda por sistema

A ver: No es admisible que existan presos de conciencia y estoy en contra de la pena de muerte (dictada por un tribunal o decidida por un policía gracias al cual sabemos que en una cabeza caben al menos siete balas, como escribió Millás). Dicho esto, hay otros aspectos del régimen cubano que me parecen dignos de análisis o incluso elogio (con perdón); su sistema sanitario y educativo con la carestía de medios que les atenaza, la ausencia de racismo, esa enfermedad de la que casi todos nos jactamos de estar vacunados pero que comprobamos cómo sigue existiendo en casi todo el globo, y esa seguridad, tan criticada por ser policial pero tan agradecida por los “turistas” y tan poco común en otros países supuestamente democráticos y en el “eje del bien” como el Perú, Colombia o Méjico. Porque puestos a hacer demagogia de la que estoy seguro que me acusarán, imagino que a una madre de Ciudad Juárez no le importaría pasar las penurias por las que pasan las familias cubanas con tal de que no hubiera desaparecido su hija.

Ya digo que para mí como “ciudadano europeo civilizado y defensor de los Derechos Humanos” fue un golpe oír a Silvio justificar el fusilamiento de unos presos políticos cubanos.

Quizá es más tranquilizador para una conciencia europea el ejemplo de Nicaragua. A mí sin embargo me dio pena que los sandinistas perdieran las elecciones después de hacer una revolución por la que dieron su vida muchos sandinistas. La elección de la mantequilla en lugar de los cañones fue una elección lógica y nada censurable. Pero recuerdo a amigos que fueron de alfabetizadores a León y lo que nos contaron. Los esfuerzos del FSLN por mejorar el nivel de vida de los más desfavorecidos, el boicot exterior, la “contra” haciendo incursiones y tolerada por los “democráticos” vecinos... Si Daniel Ortega fue un indigno representante es algo que no debe desvirtuar la revolución nicaragüense. Aquí tenemos unos cuantos “indignos” y sus partidos los mantienen en sus puestos.

Volviendo a Cuba y a Silvio, no me considero en condiciones para demonizar desde España a Cuba y aprobar el nombramiento de hijo adoptivo de Marbella al rey Fahd de Arabia Saudí; ese régimen amigo de los norteamericanos (al menos hasta el descubrimiento de las finanzas del terrorismo internacional). Lo que sí sé es que el boicot sólo sirve para hacer más pobres a los cubanos y no acelera la democratización de un país o mejor dicho, la vuelta al redil de la oveja perdida.

En la isla de Cuba no se respetan algunos derechos humanos, especialmente en Guantánamo. Ojalá cuando cambie, cambie para mejor. Por mi parte, respeto lo que dice Silvio en “El necio”:

Será que la necedad parió conmigo
la necedad de lo que hoy resulta necio
la necedad de asumir al enemigo
la necedad de vivir sin tener precio

Espero no haber dejado contento a nadie con mi comentario. Ni a los que se empecinan en defender ciegamente un régimen dictatorial ni, por supuesto, a los neoliberales “demócratas” que estarían de acuerdo con una invasión al uso de los tiempos que corren.

Hasta pronto, el aprendiz

# enviado por Rafael Martínez @ 17:24 1 comentarios

Tras su amena lectura, me han quedado resueltas algunas preguntas que me hacía.

La Matrona es una alegoría de la Caridad. La iconografía de esta virtud teologal la describe como una mujer que sostiene a un niño con su brazo izquierdo mientras lo está amamantando, mientras otros dos niños aparecen a sus pies. Uno de ellos ha de estar sujetando la mano derecha de la figura. Justifica el autor que la Matrona amamante con la derecha y tenga a los otros dos chiquillos a la izquierda, porque los artistas desconocían estos pormenores y a veces copiaban con planchas de cobre y las estampaciones hacían que éstos nunca supieran si estaban haciendo la versión correcta o la especular de los originales...

¿Por qué entonces una escultura religiosa en un edificio civil y laico como un almudí o alhóndiga (destinado a almacenar cereales). El Almudí del Concejo de Murcia tuvo también la finalidad de que no faltara un producto tan esencial como el pan en las épocas de penuria. Era una gestión municipal que tenía que ver mucho con la Caridad.

Y el pelícano. Pues eso, alimentando a sus hijos necesitados.

Por cierto que cita Manuel Muñoz Clares a otro investigador para desmitificar la idea de la automutilación del ave, indicando que esa imagen de picarse en el pecho es, en realidad, la búsqueda en la bolsa laríngea de las presas que el pelícano ha pescado.

En realidad, la filacteria que portan los ángeles da la pista del significado, pero incluso después de restaurada la orla se lee a duras penas.

“CHARITAS QUAE AD CREATIONEM COEGIT IPSA COGATAD REGENDUM”; “La Caridad que obligó a su creación (del Almudí), ella misma obligue a su administración (al Concejo)”

Queda pendiente alguna historia del edificio de la Plaza de Belluga. Continuara...

# enviado por Rafael Martínez @ 00:06 0 comentarios